Buenas, soy Gustavo Cuadrado Moya, y hoy os dejo una experiencia que viví en mi ultimo viaje a Vietnam.
Si queréis saber más sobre mí, podéis encontrarme en:
Lang es un veterano de la guerra del Vietnam... Una guerra que nunca entendió y en la que era conductor militar. Fué herido por metralla en la rodilla, el hombro y la cabeza. Aun sueña alguna noches... las pesadillas se han convertido en su zona de confort. Pero su mayor herida estaba aún por llegar.
El "agente naranja" , uno de los productos más nocivos que ha inventado el ser humano, fué lanzado por su enemigo para convertir Vietnam en una tierra infértil, tóxica y arrasada... Pero el precio aún se paga cruelmente.
Miles de niños todavía nacen con graves deficiencias genéticas. El hijo de Lang es uno de ellos. Lang Hoy estaba contento porque una fundación para ayudar a estos niños ha podido operar a su hijo de secuelas en la piel... Pero el daño es irreparable.
Antes algunos países occidentales ayudaban a esta fundación, ahora parece que la han olvidado y el 80% de los fondos los aporta el gobierno vietnamita. En occidente nos cuesta poco apagar nuestras conciencias. Mientras miles de niños siguen pagando cruelmente las consecuencias de una guerra que acabó hace mas de 40 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario